Sólo en la Vía Láctea podría haber varios billones de estrellas oscuras, sobre todo si se tiene en cuenta que la materia oscura constituye hasta el 80% de la masa de cada galaxia. Los autores del trabajo se dieron cuenta de un aspecto importante: las estrellas espejo siguen teniendo gravedad y son capaces de atraer objetos a su alrededor. Los investigadores señalaron que alrededor de estas estrellas deberían aparecer las llamadas «pepitas», aglomeraciones de materia ordinaria, que se calentarán al descomponerse y emitirán radiación. Ésta, a su vez, sería diferente de la radiación ordinaria.
Los científicos admiten que para encontrar fuentes de este tipo de radiación con un espectro no estándar se puede encontrar cerca de las estrellas enanas tenues.